Germán Ferrer y la crisis del país

Cómo ve el diputado por Lara la situación política y económica

El diálogo

-Realmente, cuando uno va a una mesa de negociaciones no puede ir con posiciones ya preconcebidas. Tú sabes que estamos en esta diatriba política y cada quien, por supuesto, requiere o necesita o quiere que se oigan sus opiniones y sus cosas, para conseguir ventaja. Yo pienso que en este momento debemos tener una sindéresis en este caso, porque ahí es donde se puede resolver los problemas. Lo que yo digo es lo siguiente, tenemos que recibir este problema del diálogo, porque si no, siempre vamos a tener la obligación de sentarnos. Pero pudiera ser en un momento determinado, cuando ya ha habido un proceso de enfrentamiento que no es deseable. O sea, que de todas maneras tenemos que sentarnos en la Mesa de Negociación, ahora o más tarde. Lo que debemos hacer en este momento que no tenemos conflictos, es ceder en el país y buscar respuestas.

–Aquí hablamos de crisis y cuando uno va a diagnosticar esa crisis, no tiene cómo comenzar. ¿Comienzo por la inseguridad?, ¿comienzo por la escasez?, ¿comienzo por las colas?, ¿comienzo por la ingobernabilidad? ¿Por dónde comenzarías tú, como diputado?

-Mira, yo creo que lo fundamental de toda esta situación, como lo decía recientemente en un programa que tuvimos la oportunidad de entrevistar a Pepe Mujica, es el problema económico. Yo creo que de ahí parten todos los problemas, básicamente. Y yo creo que sí debemos tomar una cantidad de medidas, en el sentido de poder viabilizar todo lo que es el aparato productivo. Sabemos que venimos -y eso ya es casi como muy manido- de la economía rentística. Efectivamente es cierto, nosotros venimos de una economía en la que nos acostumbramos a estar recibiendo dádivas y beneficios de una producción que prácticamente se genera sola. Muy poca cantidad de personas en el país generan producción para todo el país. Tanto, que el 97 % o más de los dólares que entran al país en este momento, ingresan producto del petróleo. Y luego, nosotros tenemos que cambiar esto y está contemplado en el Plan de la Patria.

-Pero no se le ve el queso a la tostada.

-Es un problema cultural que tenemos que cambiar obligatoriamente en función de darle una salida distinta a lo que es la economía del país. Y hoy, evidentemente, se requiere de la participación del gabinete económico del Estado para que podamos viabilizar esta situación que tenemos, que es verdaderamente crítica. Si no generamos un aparato productivo real en el país, sencillamente no vamos a tener salida a los problemas que tenemos.

-¿Cuál es el papel de los empresarios privados en relación con el gobierno y el gobierno en relación con los empresarios privados, a tu juicio?

-Mira, no debería de haber ninguna contradicción en este sentido, porque yo creo que el aparato productivo privado tiene que contribuir también, y al igual que el aparato productivo público, en generar las respuestas a todos los problemas que tenemos. Mientras nosotros estamos discutiendo y tenemos una cantidad de situaciones políticas, quien está sufriendo las consecuencias es el pueblo, por el problema de la escasez. Esta es una situación que es muy crítica y realmente muy aguda, al margen de todos los esfuerzos que pueda hacer el Estado en este sentido. Si no recomponemos lo que son las fuerzas productivas en Venezuela, estaremos verdaderamente perdidos.

-¿Cómo puede contribuir la Asamblea?

-Lamentablemente estamos en una situación política muy polarizada acá en Venezuela y eso ha traído, como consecuencia, que desde el momento en que se instala la oposición con un capital político impresionante, a lo que nos hemos dedicado es precisamente a enfrentarnos. La Asamblea inmediatamente salió con una propuesta, y todos la conocen: salir del presidente Maduro. Eso no contribuye a dar un clima verdaderamente de sosiego. Yo creo que la Asamblea, o la directiva actual de la Asamblea Nacional, equivocó la estrategia en función de haber sencillamente optado por cumplir con todo lo que realmente le corresponde, y realizar ese trabajo de contralora y de lo que nos compete, que es la ley.

-¿Y el diálogo?

-Realmente, cuando uno va a una mesa de negociaciones no puede ir con posiciones ya preconcebidas. Tú sabes que estamos en esta diatriba política y cada quien, por supuesto, requiere o necesita o quiere que se oigan sus opiniones y sus cosas, para conseguir ventaja. Yo pienso que en este momento debemos tener una sindéresis en este caso, porque ahí es donde se puede resolver los problemas. Lo que yo digo es lo siguiente, tenemos que recibir este problema del diálogo, porque si no, siempre vamos a tener la obligación de sentarnos. Pero pudiera ser en un momento determinado, cuando ya ha habido un proceso de enfrentamiento que no es deseable. O sea, que de todas maneras tenemos que sentarnos en la Mesa de Negociación, ahora o más tarde. Lo que debemos hacer en este momento que no tenemos conflictos, es ceder en el país y buscar respuestas.